Mi madre, nos dejó el sábado día 30 del mes de Julio.
La tengo presente en cada minuto. Siento con dolor la orfandad.
Este escrito le gustaba especialmente. En su pequeño libro de recopilaciones de poesias, anécdotas relatadas por diferentes autores, etc. a través de los años, viene recogido.
Una noche soñé que iba por la playa con Dios
y que se proyectaban en el cielo muchas escenas de mi vida.
En cada cuadro, veía huellas de pisadas por la arena,
a veces las de dos personas y en otras las de una.
Observé que durante los periódos más difíciles de mi
existencia, se veían las huellas de una persona y dije:
"Me prometiste, Señor, que siempre caminarías a mi lado.
¿Por qué, cuándo más te necesité no estabas conmigo?"
"Ël respondió: Cuando viste las huellas de una sola persona,
hija mía, fué cuando tuve que llevarte en brazos."
Anne Landers
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