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miércoles, 15 de agosto de 2007

Sinvergüenza donde los haya.

Venía en el periódico la noticia que el saliente alcalde de nuestro pueblo, San Bartolomé, de Coalición Canaria ha sido condenado a dos años de cárcel y multa de 20.000 €, por lo siguiente: A un matrimonio, ella de 77 años y él de 91, les da una señal para una compra de un inmueble, de 800.000 Ptas. Pasa el tiempo sin que él confirme dicha operación; mientras en el justificante de la señal, añade delante de la cifra un número 9 con lo cual la señal pasa a ser de 9.800.000 Ptas. Con dicho documento presenta una denuncia contra los ancianos (gente modesta) diciendo que no quieren vender y que por tanto tienen que devolverle lo que él les entregó, 9.800.000 Ptas., dice él, y otro tanto como manda la ley. Ha pasado creo más de un año de sufrimientos y angustias del matrimonio con declaraciones hasta que finalmente el denunciante se ha convertido en denunciado y además condenado, por estafa y falsificación de documento y lo que yo no entiendo es cómo además no tenía el agravante de abuso de autoridad, ya que en aquellos momentos era alcalde efectivo de San Bartolomé. Afortunadamente y para bien de la comunidad hay nuevo alcalde. El susodicho sinvergüenza ha tenido que dejar el partido y "dimitir" de todos sus cargos.


Esta tarde han estado un ratillo aquí en casa todos, Antonio, Raquel, Joaquín, Pablo y Diego. Luego ellos se han ido a sus cosas y nosotros a las nuestras.





Estoy leyendo un ensayo muy interesante de Kandinsky, sobre la teoría de las formas y el color en la pintura, poniendo las bases de la futura ciencia del arte, llave para un arte abstracto auténticamente profético. El titulo de la obra "Kandisnky Point et ligne sur plan". Habla del color como expresión del alma.

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